dijous, 17 de desembre del 2009

CUANDO MIS LABIOS LA TOCARON...

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Cuando mis labios la tocaron, las manos de mi abuela se agitaron, un largo estremecimiento recorrió todo su cuerpo, ya fuera un reflejo o que ciertas ternuras tengan su hiperestesia, que través del velo de la inconsciencia reconoce lo que apenas si necesitas los sentidos para amar. De repente mi abuela se irguió a medias, hizo un esfuerzo violento, como quien defiende su vida. François no pudo resistir aquella vista y estalló en sollozos. Al recordar lo que había dicho el médico, quise hacerla salir de la alcoba. En aquel momento, mi abuela abrió los ojos. Me precipité sobre François para ocultar su llanto, mientras mis padres hablaran a la enferma. El ruido del oxígeno se había apagado, el médico se alejó de la cama. Mi abuela había muerto.

Marcel Proust (1913)
En busca del tiempo perdido.
3. De la parte de Guermantes
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2 comentaris:

Carolina ha dit...

In love with Proust, ara, que és espesset eh...
I la peli dels vampierets, què? Preciosa, no li sembla?

Ciutadà K ha dit...

Oooohhhh, s'haurà d'esperar al proper Festival de Cinefagia, eh?? :P

sí, preciosa, delicada, fràgil, gelada... molt bé!