dilluns, 20 de maig del 2024

HOY ES UN DIA KAFKIANO

 


Hoy, 30 de marzo, además de Sábado Santo (antes, de Gloria) el santoral católico celebra el día de la beata María Restituta Kafka, virgen i mártir, lamentablemente poco conocida entre los creyentes y todavía menos entre los descreídos. Pero, como su vida fue bastante interesante y aleccionadora, la explicaremos. Nació en Moravia y, cuando tenía dos años, se trasladó a Viena junto con sus padres y sus cinco hermanos. De jovencita trabajó de criada y de vendedora en un estanco. Después pasó a ejercer de enfermera, ingresó en la Congregación Hospitalaria de las Franciscanas de la Caridad Cristiana. Llegó a ser enfermera en jefe de la sala de operaciones del hospital de Möding.

Los problemas empezaron cuando Adolf Hitler ocupó el poder y, gracias al Anschluss, Alemania se anexionó Austria. Kafka (la Restituta, no el otro) era firma opositora de los nazis. Decía que Hitler era un loco y, además, colgaba crucifijos en las habitaciones del hospital. Un médico la denunció  a las autoridades. La Gestapo la arrestó, no sólo por colgar crucifijos, sino también por haber escrito un poema burlándose de Hitler. La condenaron a muerte y en 1943 la guillotinaron. Muchas décadas después, el glorioso papa Juan Pablo II la beatificó. 

Si yo hubiera tenido una hija, me hubiera gustado bautizarla con el nombre de Restituta Kafka. Igual que a los niños que bautizaban como José Oriol  lo llamaban simplemente Oriol, a mi Restituta Kafka la habría llamado Kafka y punto.

- ¡Kafka, deja el Super Mario y a comer!.

De la misma forma que hay congregaciones religiosas franciscanas, dominicas, benedictinas o clarisas, para que su figura no caiga en el olvido alguna buena alma debería fundar una Congregación de Hermanas Kafkianas, o algo parecido.

Quim Monzó a La Vanguardia de 30/03/24