dilluns, 6 de setembre del 2010

LOS DERECHOS HUMANOS DEL TORO

·
Todos hemos oído y leído a estas alturas ya casi todo lo que queríamos oír y leer a propósito de la prohibición de celebrar corridas de todos en Cataluña. Lo que digamos va a cambiar poco las cosas, al menos de momento, aunque las corridas de toros podrán volver a Cataluña, si es verdad lo que decía Tolstoi: "Nada de lo que sucede es para siempre".
·
A diferencia de los que estaban a favor de las corridas de toros, o, si se prefiere, en contra de su penalización, y que han desplegado toda una bateria de argumentos filosóficos y estéticos, antropológicos, biológicos y económicos, a los detractores de ellas se diría que les bastó uno solo, no por elemental y vulnerable menos eficaz: gracias a él, y con la ayuda de algún que otro oportunismo político espurio, han logrado su propósito, y a menos que se celebren de forma clandestina, no volverá a verse lidiar toros bravos en Cataluña en mucho tiempo. Tal argumento se basaba, como es sabido, en el sufrimiento del toro y por extensión en lo que llamaron 'los derechos del toro'. Incluso hicieron oídos sordos a las paradojas a que dará lugar la abolición de las corridas, como la de que defender al toro de lidia, suprimiendo la lidia, significará tarde o temprano la desaparición de la especie del toro de lidia, sin referirnos a que los legisladores pueden conceder derechos a los animales, pero no reconocérselos, por los mismo que al hombre se le reconocen los derechos humanos al margen de la voluntad de los legisladores. "En esta diferencia -nos recordaba la profesora de Ética y Filosofía Adela Cortina-, nos jugamos mucho".
·
Al margen de si a uno le han gustado más o menos las corridas de toros o si está o no en contra de su prohibición, creo de veras que esto que ha sucedido acabaría sucediendo tarde o temprano, y resulta excesivo culpar de ello únicamente al nacionalismo catalán, o si se prefiere al antinacionalismo español. La culpa de esto la han tenido Walt Disney y su cursilería irredenta, un gran número de documentales de televisión sobre la fauna del planeta y lo que el filósofo Fernando Savater llamó con mucha gracia el 'conductismo zoófilo espiritualizado con pinceladas de budismo al baño María'.
·
Después de más de medio siglo de películas de Disney, muchos han llegado a creer, como nos recordaba Ferlosio, que los animales no sólo piensan y hablan, sino que lo hacen con esas voces empalagosas y ñoñas que han apestado nuestra infancia. La aberración de algunos documentales antropomórficos es de otra naturaleza: con envoltorio científico (las imágenes, frente a los dibujos animados, se supone que lo son), se les hace acompañar de discursos delirantes que pueden ir desde presentar como parricida al león que ha matado en una pelea al macho que lo engendró a suponer lujurioso a un mono o altruista a un perro lazarillo. Por último, ¿qué decir del budismo al baño María? A palo seco, nos condenaría a alimentarnos de mijo a todos. Que muchos hayan llegado, pues, a la conclusión de que el toro de lidia tiene un alma y conciencia de dolor y de muerte y que piensa como el espectador de un tendido, o mejor, como un abolicionista, o que acabarab reclamando el reconocimiento de los derechos humanos de toro, sólo era cuestión de tiempo.

Andrés Trapiello
en el Magazine
de La Vanguardia 22/08/10

(no parlem de l'ànima ni de la consciència del bou, sr. Trapiello, sinó de la crueltat de gaudir amb el dolor i la mort de l'altre...sigui o no un animal; crueltat que ens fa indignes i menys humans).
·

3 comentaris:

pati di fusa ha dit...

que cools són el sr. trapiello i el sr. savater! el discurs burleta de la falta d'arguments.

tampoc no he entès mai com pot desaparèixer una espècie per deixar-la de torturar i matar. perquè ja no (ens) servirà de res, potser?

en fi, que no sóc d'eixe món.

Carolina ha dit...

Ai, ara m'he endut un disgust en llegir al sr. Trapiello, el tenia jo en un altre bàndol :(
D'on no n'hi ha no en raja, no?

Ciutadà K ha dit...

sí, a mi la postura del sr. Trapiello també m'ha sorprés, eh??? :(